miércoles, 13 de julio de 2011

Quiero llorar

No sé si estoy enojada, frustrada, o resignada. Por más que le eches ganas, por más que trates de ver la vida de otra manera, mentalizarte tú, terminas empapándote del ambiente que te rodea. Las conversaciones de las personas casi siempre giran en torno a la violencia, a quién levantaron, a quien asaltaron, a quien golpearon, le quitaron el coche, etc. Yo entiendo que la gente tiene miedo y se quiere desahogar pero habemos personas que NO queremos escuchar eso.  El lunes venía de mi trabajo cuando nos detuvimos en una gasolinera, todo normal, eran como las siete de la tarde, con un solazo. Cuando en eso sale una camioneta lobo negra, brillosa, vidrios polarizados adentro unos cuatro gatilleros. Eran unos pubertos de no más de 20 años. Quisieron gasolina gratis, sacaron su arma, y después se quedaron justo en frente de nosotros. Mirando hacia la nada, como si buscaran a quien levantar, no sé. Nos quedamos quietos, esperamos que avanzaran, y cuando al parecer lo hacían que se regresan y nos siguen (o siguen nuestra dirección, who knows!), nos pusimos nerviosos pero seguimos. Yo me puse en oración inmediatamente y aunque los veíamos por el retrovisor finalmente cambiaron de ruta dejándonos bien asustados. 

Ayer mientras intentaba dormir oí unos gritos bien feos y algunos balazos. No me moví de la cama, abrace la almohada. Pero ya no pude volver a dormir hasta las cuatro de la mañana. Como quiera llevaba algún tiempo durmiendo con la luz encendida pero hasta eso me da miedo. Las casas de las calles están llenas de púas en los barandales y las paredes. Me acuerdo que antes, en la noche le tenías miedo a los fantasmas, ahora se los tienes pero a los vivos, a que alguien se meta en la noche y te robe o te levante. Yo trato de no pensar en eso, rezo una hora antes de dormir y me da paz. Pero no puedo sola contra toda la población que no hace otra cosa más que desparramar el miedo por doquier. Entonces me canso, estoy fastidiada de vivir así y me dan ganas de llorar. No puedo creer que vivimos así mientras que en otros lugares viven en paz (y en otros mucho peor, lo sé). El caso es que quiero tener vacaciones de todo esto. Ver el mar, no pensar en tanta pinche violencia. Quiero llorar. Afortunadamente aun no estoy como otros que ya andan con antidepresivos, y calmantes. Me siento estable pero es enojo, por vivir sin tranquilidad. 

Y encima hay un pájaro que hace ruido todo el día y toda la noche y eso me pone nerviosa. Mi gata no volvió y me da mucha tristeza porque era mi bebé y la extraño un chingo. Quiero dormir con la luz apagada, y completamente tranquila. Quiero ser feliz dentro de mí pero también afuera.