jueves, 17 de marzo de 2011

En visperas de primavera


Me gusta esta temporada del año El día no esta ardiendo ni esta muy fresco. Recuerdo perfectamente que hace un año (yo todo lo recuerdo perfectamente, quizás me debí de haber inclinado por la onda de historiadora, pero, bueno) estaba haciendo muchísimo frío casi en todo el mundo. Y todos estábamos muy contrariados precisamente por eso, porque ya casi era 21 de Marzo y el frío loco de 3 grados. Bueno, soy tan ñoña que recuerdo que Ricky Martín lo había puesto así en su twitter, según el muy asombrado porque hacia mucho frío en una playa como Miami.

A diferencia del año pasado en este año me he sentido notablemente bien. Estos meses me ha demostrado que hace maravillas y que las cosas por su propio peso caen. Mientras tanto a mediados de cada mes leo la correspondencia (que lindo se lee eso) con B a quien honestamente entiendo poco pero nos damos buenos consejos, buenas cibertertulias o al menos eso es lo que quiero pensar que sucede.

También tengo rutinas que me han hecho sentir mejor. Rutinas como de monje. Me levanto a las cinco de la mañana, me lavo la cara, los dientes, y leo quince minutos para despertarme. Después, a manera muy silenciosa, saco mis apuntes espirituales y comienzo a cantar el mantra de la compasión. Después medito un poco, me cambio rapido y a las siete de la mañana ya voy en camino al gimnasio. En el gimnasio hago una hora de caminadora, y media de bicicleta, y después otra media de pesas (tres veces por semana, pues a esas les tengo respetito por aquello de quedar de forma extraña) enseguida me salgo en chinga. Llego a mi casa, me cambio rápido y me voy a laborar en donde paso la mayor parte del día para regresar después de las 6 a casa.

Trato de leer un poco porque si no no estoy a gusto y caigo rendida por ahí de las once. Pero lo hago muy feliz. Sobre las novedades del gimn eso da para otro post.